jueves, 2 de mayo de 2019

Ganadería Extensiva

GANADERÍA EXTENSIVA

La ganadería extensiva es el conjunto de sistemas de producción ganadera que aprovechan eficientemente los recursos del territorio con las especies y razas adecuadas, compatibilizando la producción con la sostenibilidad y generando servicios ambientales y sociales. Contempla aspectos clave como la utilización de razas autóctonas, la movilidad del ganado, el bienestar animal o el manejo ajustado a la disponibilidad espacial y temporal de los recursos disponibles en cada zona. Esta actividad es esencial para el territorio y la sociedad, ya que no solo genera productos de calidad, sino también configura el paisaje, ayuda a controlar los incendios forestales, regula los ciclos del agua y la calidad del suelo, ayuda a potenciar la biodiversidad y a conservar el patrimonio cultural y la identidad territorial.

La ganadería extensiva es un sistema de producción animal que se vincula al aprovechamiento de recursos naturales, basado en una determinada carga ganadera. Básicamente se trata de animales criados en libertad, en extensiones de terreno suficientes para una manutención más o menos natural. No se vincula a una raza o ecosistema determinado, pero la realidad es que es un concepto que en Europa está asociado fundamentalmente a razas como la bovina y la ovina, siendo prácticamente inexistente para la porcina.

Los sistemas de producción porcina extensiva suponen un porcentaje mínimo respecto a la producción porcina total en Europa, siendo la única excepción reseñable el caso de España, en que la ganadería porcina de raza ibérica en extensivo, sí tiene un porcentaje más representativo. Aún así estamos hablando, y sólo para España, de un 5-6% de la producción porcina total. La práctica totalidad de la ganadería porcina extensiva es la del cerdo ibérico, raza que tiene una especial vinculación, probablemente más que ninguna otra, a su hábitat natural, la dehesa. Este hábitat, típico de la zona Suroeste de la península ibérica, es un ecosistema de un enorme valor natural, cuya supervivencia garantiza actualmente la cabaña ibérica criada en extensivo.

En España existe una normativa en vigor que define a estos efectos la carga ganadera máxima, permitiendo a las comunidades autónomas establecer criterios más restrictivos. Superada dicha carga, la explotación no puede considerarse como extensiva, aunque los animales se encuentren en un régimen de producción al aire libre. En definitiva se trata de aprovechar los recursos naturales de forma racional y de evitar la sobrexplotación, para preservar los ecosistemas. De ahí que la determinación de la carga ganadera máxima se regule además anualmente, en función de los recursos disponibles para ese año en cuestión (que pueden variar según la lluvia, plagas etc).

La alimentación en este tipo de ganadería será fundamentalmente a base de recursos naturales: pastos, rastrojos, matorral… No obstante, sí se puede complementar con pienso, según la temporada del año y las necesidades fisiológicas de los animales. En el caso especial del ibérico, la normativa se remite en cuanto a la alimentación, a la Norma de Calidad en vigor. Por tanto, cuando hablamos de explotación extensiva de porcino estamos refiriéndonos a un sistema de producción que ha de contar con suficientes recursos naturales para su aprovechamiento por el cerdo en régimen de pastoreo, lo que implica extensiones grandes de terrenos. A esto hay que añadir cuando hablamos de la calidad “de bellota”, que el animal debe terminar su engorde en la montanera, es decir, la temporada de bellota, básica para la calidad de los productos derivados del cerdo ibérico. Ello nos lleva al vínculo esencial entre el cerdo ibérico de bellota y la dehesa, su ecosistema, que permite la cría de estos animales en fincas muy extensas y el remate de su alimentación a base de bellota, lo que limita de nuevo las zonas productoras de este tipo de ganadería.

Básicamente la denominada dehesa está formada por varias especies arbóreas, sobre todo Quercus (encina, roble, alcornoque, quejigo) además de multitud de herbáceas (mayoritariamente gramíneas).
La explotación extensiva de porcino debe contar con una base territorial mínima: no se pueden considerar ganaderías extensivas de porcino aquellas explotaciones que superen los 15 cerdos por hectárea. Esto supone que una ganadería de unos 1000 cerdos, requiere ya una extensión en la fase de cría de al menos unas 70 hectáreas, es decir unos 700.000m2. A esto hay que añadir restricciones adicionales cuando se acerca la montanera: para poder calificar los cochinos como “de bellota”, la carga ganadera no podrá superar la de un cerdo por hectárea, en los períodos comprendidos entre el 1 de octubre y 15 de abril. Hablamos ya entonces de 1.000 hectáreas para esos 1000 cerdos, es decir ¡10.000.000 m2!. Y estamos hablando de mínimos, un cerdo de bellota debe disponer de una superficie de 1 a 2 hectáreas (más de media tonelada de bellotas y de 100 kg de hierba por animal). Esto se lleva aún más allá en determinadas explotaciones que hacen de la calidad de sus animales en su fase de cría una de sus señas de identidad, como ocurre por ejemplo con Juan Pedro Domecq, una explotación pequeña, con una media de sacrificio de unos 3000 cerdos anuales, que cuenta con una media superior a las 2,5 hectáreas por cerdo en época de montanera. Se trata pues de verdaderos animales de “lujo”, de ahí el precio de los productos finales, y por supuesto la calidad.

Además es importante saber el control administrativo que hay sobre las fincas de “montanera”, para permitir su explotación con este fin: deben ser superficies dadas de alta conforme a la normativa aplicable sobre identificación de parcelas y recintos de dehesa. Esto limita de forma natural las zonas y la cantidad de animales que pueden criarse bajo este sistema. La densidad del arbolado y producción de bellotas es muy variable, de ahí la necesidad de darse de alta en el sistema, y de su revisión anual, para determinar la carga ganadera que puede tener cada finca, cada año.

Se trata de, por un lado, garantizar la preservación de un ecosistema único de la península ibérica, como es la dehesa, y por otro, de defender la calidad de un producto también únicamente español, el jamón de bellota 100% ibérico, como símbolo de la máxima calidad en el producto ibérico.
La dehesa, además de la esencial producción de bellota, tiene con carácter general en su suelo, una cubierta vegetal herbácea que da lugar a pastizales más o menos abundantes. Estos pastos son un suplemento alimentario esencial para el cerdo ibérico. De ahí la “simbiosis” perfecta entre el cerdo ibérico de bellota y la dehesa: este ecosistema permite la extensión y los pastos necesarios en su fase de cría y le ofrece, en los meses precedentes a su sacrificio (de enero a marzo), la temporada de bellota, cuya maduración se prolonga desde primeros de noviembre a finales de febrero, terminando a final de marzo. Este régimen natural de alimentación, el sistema de explotación y la genética de este animal tan especial, determinan el contenido y la composición de la grasa intramuscular, que dará lugar a la inigualable calidad del producto ibérico de bellota, llevado a su máximo con el jamón de bellota 100% ibérico.

Así a la vez que conseguimos un producto excelso, debemos siempre recordar que de no ser por el cerdo ibérico, las dehesas se encontrarían en regresión, podrían hasta llegar a desaparecer. Es este sistema ganadero de producción porcina ibérica en extensivo, el que, a base de un correcto manejo y control, lleva a alcanzar un equilibrio entre producción y conservación, adecuando siempre los niveles de carga ganadera a la disponibilidad de recursos.

Ciclos Reproductivos


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CICLOS REPRODUCTIVOS 

Los ciclos reproductivos están regulados por factores ambientales, genéticos, fisiológicos, de comportamiento, psicosociales y endocrinos, siendo la interacción de las hormonas sexuales la responsable del desarrollo y evolución del funcionamiento reproductivo del individuo en cada una de ellas.

La secreción de hormonas comienza siempre durante la vida fetal, poco después de la diferenciación sexual, reduciéndose al final de la misma unos dos meses antes del nacimiento. Los niveles se mantienen bajos hasta el inicio de la pubertad, período durante el cual se eleva paulatinamente, tanto en animales enteros como en castrados en edad temprana, caso en el cual el proceso es más claro debido a la ausencia de la retroalimentación negativa de los esteroides.

La estructura de los ovarios presenta los cambios necesarios para la diferenciación sexual, hasta que al final de la gestación el ovario contiene millones de folículos primarios dentro de una estructura de tejido intersticial organizado en el epitelio ovárico denominado anteriormente epitelio germinal.

La estructura básica de los testículos, conductos seminíferos y tejido intersticial, permanece sin cambios desde la diferenciación sexual de las gónadas al comienzo del período fetal hasta la pubertad.

El grado de fertilidad se inicia durante la pubertad y se mantiene durante varios años declinando con la edad. No se logra la eficiencia total de reproducción en ninguna de las especies durante la primera aparición del estro o durante la primera eyaculación. Existe un período de esterilidad adolescente, el cual es notablemente corto, unas cuantas semanas, en los animales domésticos.

La secreción de gonadotropinas como de factores de crecimiento comienzan en la vaca durante la vida fetal, un poco después de la diferenciación sexual, primero o segundo mes de gestación. Esta secreción involuciona temporalmente y en el bovino disminuye un poco dos meses antes del nacimiento, para elevarse posteriormente al inicio de la pubertad.

La disminución en la secreción de gonadotropinas está relacionada con la maduración del SNC y ocurre cuando las estructuras superiores del cerebro se hacen cargo de la actividad hipotalámica. El aumento en la liberación de gonadotropinas causa la eliminación del control inhibitorio del SNC, al tiempo que el desarrollo corporal alcanza poco a poco un tamaño compatible con la reproducción.

Durante la vida fetal y neonatal, la gametogénesis y esteroidogénesis son independientes, en tanto que en la pubertad se relacionan en forma estrecha. Hay evidencias que permiten afirmar que las gonadotropinas no están involucradas en el inicio de la foliculogénesis, la cual estaría controlada por “Factores de Crecimiento” intraovaricos, los cuales de alguna manera determinarían tanto el número como el momento en que estos folículos comienzan a crecer. Cuando un folículo abandona la población de folículos de reserva continúa su crecimiento hasta que es ovulado, o bien se atresia. Por lo tanto no existe una población de folículos de reserva con antro. (ARRAU)

Razas

RAZAS BOVINAS

Que es una raza?

El término de raza probablemente provenga de la palabra francesa rasse y la italiana razza, las que se traducen como casta o cepa. Es difícil determinar cuando se utilizó por primera vez para referirse a diferencias entre poblaciones humanas o animales. Algunos autores piensan que el término se diseminó en Europa durante los siglos XVI y XVII.
El concepto de raza es una forma simplificada de nombrar poblaciones que tienen caracteres comunes, que los distinguen de otros de su especie y se transmiten a su descendencia. Sin embargo, existen varias definiciones que van desde los clásicos como Raza es un concepto técnico-científico, identificador y diferenciador de un grupo de animales, a través de una serie de características (morfológicas, productivas, psicológicas, de adaptación, etc.) que son transmisibles a la descendencia, manteniendo por otra parte una cierta variabilidad y dinámica evolutiva (Sierra, 2001).

Razas bovinas

Existen en el mundo aproximadamente unos 900 tipos de razas de ganado bovino distribuidos en los 5 continentes. En muchas regiones las razas de bovinos nativas utilizadas predominan, mientras que en otros, los tipos comunes son de origen externo.
En los países que cuentan con ganadería bovina abundante —en virtud de su capacidad alimentaria—, aproximadamente una docena de razas de bovinos  son las que predominan, tanto en el sector cárnico como en el lechero, siendo más contrastante la situación en este último, donde una sola raza (Holstein o frisona) tiene abrumador predominio numérico en constante ascenso.
Otras razas, antes favorecidas, ahora se encuentran en peligro de extinción por la tendencia del sector ganadero a favorecer a las razas de más alto rendimiento, en detrimento de segundos o terceros lugares. Como ejemplos de estas razas de ganado vacuno podemos citar a la Guernsey y la Ayrshire (pertenecientes al grupo lechero) y la raza Aberdeen Angus (del grupo tipo carne), a pesar de haber sido utilizada esta última en numerosas cruzas que derivaron en razas sintéticas.
En general, el concepto raza define a animales que comparten un genotipo homogéneo, que se refleja en el fenotipo en caracteres de tipo, tales como color de capa, presencia o ausencia de cuernos, etcétera y que hacen a los animales muy semejantes entre si. El bovino fue el primero de entre las especies animales que fue domesticado por el hombre con fines netamente productivos. En un principio se aprovecharon las carnes, las pieles. Más tarde se utilizó su leche y finalmente se utilizó como animal de trabajo.
La importancia del estudio del origen de las razas de ganado bovino, es conocer el ambiente en el cual crecieron y consecuentemente podríamos conocer las características adaptativas que desarrollaron, para poder utilizarlas en forma optima para las diferentes regiones de cada país.

Anatomía y fisiología del sistema digestivo

ANATOMÍA Y FISIOLOGÍA DEL SISTEMA DIGESTIVO EN RUMIANTES 

FUNCIONES BÁSICAS DEL SISTEMA DIGESTIVO:El sistema digestivo tiene como función básica en todos los animales, realizar la función del alimento, la absorción de los nutrientes y la excreción de los residuos; para ello el animal dispone de diferentes órganos y procesos, cuya meta final es que los nutrientes sean utilizados en los tejidos.

ANATOMÍA Y FISIOLOGÍA DIGESTIVA DE LOS BOVINOS:Los rumiantes se caracterizan por su capacidad para alimentarse de pasto o forraje. Esta característica se basa en la posibilidad de poder degradar los hidratos de carbono estructurales del carbono, como celulosa, hemicelulosa y pectina, muy pocos digestibles para las especies de estomago simple. Basada en esta diferencia fundamental, la fisiología digestiva del rumiante adquiere características particulares.

La degradación del Alimento se realiza mayoritariamente por digestión fermentativa y no por acción de enzimas digestivas , y los procesos fermentativos los realiza diferentes tipos de microorganismos a los que el rumiante aloja en sus divertículos estomacales. Esta digestión fermentativa, si bien favorece al rumiante al permitirle degradar hidratos de carbono, también afecta la digestión de todos los demás componentes de la dieta, expuestos a los mismos procesos fermentativos sin que esto represente siempre una ventaja desde el punto de vista del mejor aprovechamiento del alimento.En rumiantes adultos los divertículos estomacales pueden a ocupar hasta el 75% de cavidad abdominal, y junto con su contenido representa el 30% del peso vivo del animal.

BOCA: Los rumiantes se realiza principalmente la molienda de los alimentos, siendo las enzimas salivales de poca importancia.


FARINGE Y ESTOMAGO: La faringe es órgano de paso común para las vías respiratorias y digestivas.El esófago es un órgano que conecta la faringe con el estomago.
El paso del bolo alimenticio de la faringe al estomago de denomina deglución.
Cuando el alimento, ya convertido en quimo, pasa del rumen a la boca por estos mismos órganos, se denomina regurgitación.

ESTOMAGO DE LOS BOVINOS: Este se divide en cuadro cavidades: retículo(red o redecilla) rumen (panza) omaso (librillo) abomaso (cuajar); solo este último es glandular y funcionalmente análogo al estomago del no rumiante, mientras que los anteriores están cubiertos por un epitelio queratinizado y carecen de glándulas.

RETÍCULO: Toma su nombre de la disposición en forma de red de los pliegues de su mucosa que está situado cranealmente y en contacto con el diafragma, comunicándose con el rumen atreves del pliegue retículo-ruminal que los convierte en una sola unidad funcional (retículo-rumen).

RUMEN: Es el compartimiento más voluminoso y está en contacto con la pared abdominal izquierda.la superficie visceral presenta surcos que se corresponden con proyecciones internas llamadas pilares.
Los surcos longitudinales izquierdo y derecho lo dividen en los sacos dorsal y ventral. El surco craneal separa el saco ciego cráneo-dorsal del cráneo-ventral. Por último el surco caudal, junto a los surcos coronarios dorsal y ventral delimitan los sacos ciegos caudo-dorsal y caudo-ventral.
La mucosa del rumen presenta papilas digitiformes cuyo tamaño y grado de queratinización dependen del estimulo provocado por el tipo de dieta que está consumiendo el rumiante.
Se ubica a la derecha del rumen, y es de forma esférica. Se comunica con el retículo por el esfínter retículo-omasal y con el abomaso por el esfínter omaso-abomasal. Presenta dos partes claramente diferenciadas, el cuerpo y el canal omasal.
El cuerpo es ocupado por un número variables de hojas o laminas, que insertadas en la curvatura mayor del omaso dirigen su borde libre hacia el canal del omaso, que se encuentra en su curvatura menor y comunica ambos esfínteres. Durante la fermentación ruminal, la población de microorganismos, principalmente bacteria, fermenta los carbohidratos para producir energía, gases metano y bióxido de carbón, calor y ácidos. El ácido acético, ácido propionico, y ácido butírico sonacidos grasas volátiles estos representan el 95% de los ácidos producidos en el rumen también la fermentación de aminoácidos producen ácidos llamados iso ácidos.

ABOMASO: Se ubica a la derecha y ventralmente en la cavidad abdominal, tiene forma de saco alargado con un extremo ciego denominado fundus y un extremo pilórico que desemboca en el duodeno. La mucosa es de tipo glandular y en el fundus presenta pliegues que aumenta su superficie.

INTESTINO DELGADO:Esta es la primera parte del intestino en general y se divide en duodeno, yeyuno, e íleon. aquí se realiza la absorción (paso de nutrientes atreves de la pared del intestino).
De los nutrientes, lo que es posible gracias a las vellosidades de las paredes intestinales y a su permeabilidad . en el interior del intestino se encuentran numerosas glándulas secretoras de jugos y células especializadas en la absorción de productos asimilables a la digestión.

INTESTINO GRUESO: Es la ultima parte del intestino y esta compuesta por el ciego por el recto y ano allí también se absorben algunos nutrientes y lo q finalmente no se absorbe es expulsado gracias a los movimientos peristálticos en forma de materia fecal o estiércol.

DESARROLLO DEL SISTEMA DIGESTIVO DEL RUMIANTE:El ternero en sus primeros meses de vida es considerado monogástrico,pues aun no tiene desarrollado el rumen retículo. Para ello existe la gotera esofágica,que permite el paso de la leche directamente al abomaso ) cuajar ), donde se dirige. Se considera que el rumen se hace funcional a partir de los tres meses de edad de la cría. 

Alimentación y Nutrición



ALIMENTACIÓN Y NUTRICIÓN 

Resultado de imagen para alimentación de bovinosLa alimentación y nutrición del ganado es esencial para una buena salud y producción de carne. En la ración diaria es necesario proveer de una cantidad adecuada de nutrientes para el crecimiento, mantenimiento corporal y preñez; cada uno de estos procesos requiere carbohidratos, proteína, minerales, vitaminas, agua y la cantidad necesaria de alimento apropiado y balanceado.
El nivel de energía de la ración ofrecida al ganado afecta a los diferentes aspectos sensoriales de la carne, de modo que dietas ricas en carbohidratos incrementan el contenido de grasa tanto de cobertura de la canal como la cantidad de grasa que se encuentra entre las fibras musculares (marmoleo). El incremento de grasa en la carne se relaciona con un incremento de la jugosidad, una mejoría en la sensación de terneza, así como un incremento de la intensidad de sabor y aroma. No podemos olvidar que en la fracción grasa de la carne residen los compuestos responsables del aroma específico de la carne.
El proceso de crianza del ganado para la producción de carne de res canadiense comienza en los ranchos, donde el ganado es alimentado por pastoreo la mayor parte de sus vidas durante los meses de verano y durante el invierno es alimentado con forraje el cual incluye hierba, así como plantas leguminosas tales como el trébol y la alfalfa.  Durante el invierno también se puede proporcionar grano para asegurar que el ganado tenga energía suficiente para su crecimiento.
A los 3 o 4 meses antes de salir al mercado, el alimento para el ganado puede ajustarse gradualmente a una dieta que consiste principalmente de granos como el maíz o la cebada. El grano ayuda a producir un mayor grado de marmoleo, una carne de res canadiense tierna, sabrosa y con grasa firme de color blanco. El maíz es el único con vitamina A, E y D, además es rico en grasa.
Ocasionalmente se tiene la percepción que hay una diferencia nutricional entre la carne proveniente de ganado alimentado por pastoreo y el ganado alimentado por pastoreo y terminado con dieta a base de granos. En un estudio reciente respecto a la grasa, se mostró que ambos tipos de alimentación en el ganado aportan ácidos grasos omega-3, no se encontraron diferencias en los niveles de colesterol o en nutrientes como el hierro y el zinc. Hubo algunas diferencias de nutrientes en vitamina B, calcio y potasio, pero estas diferencias no fueron significativas en función del total de la dieta. En resumen se concluyó que ambos aportan una cantidad significativa de nutrientes y  la diferencia nutricional entre ambos tipos de carne no es significativa.
La producción ganadera en Canadá está respaldada por más de 300 años de historia y hoy en día existen más de 63,000 granjas y ranchos de ganado bovino, donde los productores toman en serio su responsabilidad, el cuidado del ganado y los recursos naturales para la producción de carne de res de alta calidad y seguridad.